Playas maravillosas, mar cristalino, escarpados senderos inmersos entre vigorosos viñedos y olivares, campos de limones y bosques de pinos: para quien le gusta nadar o pasear en barca, caminar por el centro histórico o descubrir una naturaleza sin contaminar.
Como poquísimos otros casos en el mundo, las Cinco Tierras están sometidas a doble tutela: el Área Marina Protegida salvaguarda el mar y sus riquezas, y el Parque Nacional preserva un paisaje constituido principalmente por paredes de piedra seca, construidas y mantenidas a lo largo de los siglos con gran trabajo.
Desde 1997, las Cinco Tierras están tuteladas por la UNESCO como Patrimonio Mundial de la Humanidad.
MONTEROSSO
Monterosso es la única de las Cinco Tierras con una playa ancha y un paseo marítimo que une el centro histórico, con las típicas casas-torres atravesadas por estrechas callejuelas, con el nuevo barrio residencial de Fegina. Sus orígenes se remontan al año 629, cuando las poblaciones de las colinas, huyendo de las invasiones bárbaras, se establecieron a la orilla del mar. Probablemente el nombre deriva del color rojo del terreno.
Para ver
La Torre Aurora, la más imponente de las tres que quedan en Monterosso, domina el muelle del burgo medieval y lo separa del moderno. Del castillo, antigua construcción defensiva a pico sobre el mar, quedan las impresionantes ruinas que dominan el centro histórico. En la iglesia de San Francisco, convento de capuchinos erigido en el siglo XVII, se guardan obras de notable relevancia entre las que destaca una Crucifixión, atribuida a Van Dyck.
Villa Montale, construida a principios del siglo XX, es el lugar en el que el poeta Eugenio Montale, Premio Nobel de Literatura en 1975, escribió algunas de sus poesías más importantes.
El gigante, la gran estatua construida en la misma época, representa al dios Neptuno.
Con un brazo empuñaba un tridente mientras que con el otro sostenía una gran concha que hacía de terraza de una hermosísima villa.
En los años cincuenta, la villa fue destruida y la estatua sufrió grandes daños. Hoy en día no tiene brazos ni la concha que sujetaba, pero sigue dominando, con sus 1.700 quintales de peso, el rincón más romántico de la playa de Fegina.
VERNAZZA
Erigida en la desembocadura de un torrente, Vernazza es un puerto natural que ha representado durante siglos la única escala segura de las Cinco Tierras; tanto es así que su nombre parece derivar de la corrupción del término latín hibernacula, es decir, estación marítima.
Para ver
El castillo, desde el que se disfruta de un panorama de belleza inigualable, es en realidad una torre que forma parte de una serie de fortificaciones que rodean Vernazza desde el siglo XIII. La iglesia de Santa Margarita de Antioquía está construida en típico estilo gótico ligur, y se empezó el año 1318.
Curiosidades
A lo largo de los siglos, Vernazza ha alojado a los mejores carpinteros de ribera de la Liguria, que han construido embarcaciones estupendas.
CORNIGLIA
Corniglia es la única de las Cinco Tierras que no está directamente conectada con el mar, sino sobre un promontorio rocoso para llegar al cual es necesario subir los 377 escalones de la Lardarina, una larga escalinata de ladrillo. Sus orígenes se remontan a la época romana: parece que su nombre deriva de uno de los colonos que se dividieron el territorio tras la victoria sobre Aníbal (77 a.C.).
Para ver
La iglesia de San Pedro, edificada en 1334, es uno de los monumentos más interesantes de las Cinco Tierras, ya que presenta una superposición de estilos muy particular: el sencillo gótico ligur y el refinado barroco.
El Oratorio de los Disciplinados de Santa Catalina, que pertenece al siglo XVIII, es un maravilloso punto de observación panorámica.
Curiosidades
La estructura urbana de Corniglia presenta características originales respecto a las de los otros pueblos: las casas son más bajas, aunque han sido elevadas recientemente, y son similares a las de los pueblos de interior.
MANAROLA
Famoso por la sugerente Vía del Amor, que lo une a Riomaggiore, el burgo de Manarola se alza sobre un alto promontorio de roca oscura. Es la más antigua de las Cinco Tierras: parece que su nombre deriva del latín Manium arula, es decir, templo dedicado a los dioses Manes.
Para ver
La iglesia de la Natividad de Santa María Vírgen y San Lorenzo fue construida el año 1338 en típico estilo gótico ligur, sencilla, rigurosa, pero al mismo tiempo graciosa.
Sobre el pueblo se erige el santuario de N. S. de la Salud, del siglo X aproximadamente.
Curiosidades
Entre las típicas casas con el tejado de pizarra del centro histórico destaca una singular pirámide de cemento blanco que es una señal trigonométrica para los navegantes.
RIOMAGGIORE
La más oriental de las Cinco Tierras se ha desarrollado verticalmente en el estrecho valle del río Maior (cubierto), del que toma el nombre. Cuenta la tradición que fue fundada por un grupo de prófugos griegos en el siglo VIII. Aquí empieza la romántica Vía del Amor, un sendero tallado en la roca que conduce a Manarola.
Para ver
Desde el castillo de Cerricò, una fortificación del siglo XIII que hoy en día sigue dominando Riomaggiore, se puede disfrutar de una espléndida vista sobre el mar.
La pequeña capilla de los Santos Roque y Sebastián se erigió en recuerdo de una terrible peste que azotó el pueblo en 1480.
La iglesia de San Juan Bautista, que se remonta a 1340, conserva en su interior numerosos cuadros y esculturas valiosas.
Curiosidades
El pintor impresionista Telemaco Signorini pasó varios periodos de su vida en Riomaggiore, e inmortalizó con gran sentimiento a las gentes del lugar en sus dibujos, cuadros y escritos.